Ñacurutú
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        Lechuzo que puede llegar a los 0,40 mts. de altura puesto de pie, muy feo de rostro y de ojos aparentemente grandes por el plumaje, pero pequeños en realidad. El término también es guaraní.
   Se llama con su nombre, en forma de insulto, al hombre que merodea mucho en busca de beneficios, pero que es perezoso y poco inteligente para conseguirlos. El animal está siempre muy quieto de día y se mueve misteriosamen­te por la noche.
   Ladra como un perro cuando se le irrita y maulla como un gato cuando se asusta. Los indígenas creían que si se le toca, contagia la pereza a los hombres, por su modo torpe para moverse. Por eso era objeto de temores y se huía de su presencia.